miércoles, 11 de enero de 2017

Recomendaciones del año 2016: Libros



¡Hola a todos! Un año más, desde las Recomendaciones (o no) de Mt queremos desear a todos los lectores un…

¡FELIZ AÑO NUEVO!

Que sorpresa. ¿Verdad? Como buen cambio de año, toca hacer balance de lo visto/leído y sacar su listita correspondiente sobre qué ha sido lo mejor y lo peor. 

Primero de todo, mis reglas: El único motivo para que una propuesta sea elegible para salir en estas recomendaciones es que haya tenido su reseña correspondiente a lo largo del año. Da igual si es de 2016, 1807 o 2114, si ha caído este año que se acabar de ir… ¡me vale! De la misma manera, no colocaré dos obras del mismo autor en ninguna categoría. Quiero intentar mantener un poco de variedad, así que no creo que nadie se vaya a enfadar por esta consideración…

Este año he subido un poco el ritmo de entradas, sobrepasando las 100, lo que significa una casi cada tres días. ¡Casi nada! Debo reconocer que también ha sido el año que más me ha costado decidir quiénes son los ganadores en cada categoría, con una dura competencia en todos los casos. Ha habido un buen puñado de joyas y truños y me ha fastidiado dejar fuera a algunos, pero bueno, ¡no hay espacio para más!

Empezaré con los libros, ¿Cuáles son los tres que más me han gustado este año?

La mayor sorpresa que me he llevado… ¡Ningún libro de ciencia-ficción! El género me encanta y he leído un puñado de buenas propuestas dentro de él, pero al final han sido otros los que se han llevado el gato al agua. 

Los mejores

 BLACKSAD (Juan Díaz Canales, Juanjo Guarnido)
Y de gatos empieza la cosa, con el gato negro con más mala leche de los Estados Unidos reimaginado por Juan Díaz Canales y Juanjo Guarnido. Blacksad es un detective privado muy gatuno que se encarga de meter el hocico en los líos de lo más desagradables. Así, por entrar en detalles, la expresividad de su dibujo y su acertadísima elección de los tonos en cada momento convierten leer Blacksad en un placer para la vista. Además, Blacksad es el epítome del personaje de novela negra, un detective venido a menos que lucha por mantener un mínimo de integridad en una sociedad corrupta y decadente, sin poder evitar peligrosas panteras y gatitas salvajes que lo meterán en mil problemas. Simplemente, mola. Sus relatos tocan diversos sub-géneros dentro de la novela negra con una maestría al alcance de muy pocos. En Blacksad, todo es bueno. Su dibujo es un gozo para la vista; su imaginería es vivaz; su historia es un placer para el alma y Blacksad un amigo que no defrauda. Ningún consumidor de cómics de calidad debería dejarlo pasar. De hecho, si no eres consumidor de cómics, tampoco deberías dejarlo pasar. Deja con ganas de más y más aventuras.

EL SOL DE BREDA (Arturo Pérez-Reverte)
Un acompañante fiel a lo largo de cientos y cientos de aventuras es también el inefable Capitán Alatriste. No es el hombre más honesto, pero es valiente y fiel. Cuando lo conocí malvivía en Madrid, alquilándose por cuatro maravedíes en trabajos de poco lustre, a menudo en calidad de espadachín por cuenta de otros que no tenían la destreza o los arrestos para solventar sus propias querellas. Ya saben: un marido cornudo por aquí, un pleito o una herencia dudosa por allá, deudas de juego pagadas a medias y algunos etcéteras más. En El Sol de Breda encontramos la más redonda de sus historias. En él encontramos relatos de épica descarnada y luchas por la supervivencia, Iñigo está en la búsqueda de su lugar en el mundo y, sobretodo, lo que más impacta en el libro es el espléndido retrato que realiza de la soldadesca española de la época: compuesta de soldados que son lo peor de cada casa, malhablados y con pocos escrúpulos éticos, pero al mismo tiempo orgullosos de sus orígenes y custodios del honor que supone ser un soldado de los tercios, el ejército más temido de la historia (lo único que tienen, quizás). Hará las delicias a todos aquellos que disfruten de las novelas históricas, de las novelas de aventuras o de las novelas en general. Indispensable para cualquier fan de las aventuras del Capitán. Y si no sois versados en sus andanzas, acudid, raudos, a la primera de sus novelas. Merece la pena.

EL HOMBRE SIN PASADO (Peter May)
El último de los libros es una recomendación de Lauriqui. No sé si está estupenda novela negra me habrá gustado más porque acabo de mudarme a la zona en que se desarrolla (os recomiendo pasar unos días por las Hébridas, impresionan), que el autor convierte en un personaje más de la propia historia, con su atmósfera desolada, unas islas por los vientos árticos, dónde la lluvia vuela horizontalmente, martirizando las moradas de unos habitantes que luchan por vivir en una región oscura e inhóspita; o porque está  sus protagonistas están esculpidos con mimo, desplegando una inesperada falibilidad que los hace entrañables e inolvidables; o porque su argumento es capaz de dejarte sin aliento. Un adorable ancianito, presa de demencia senil parece esconder un oscuro secreto: En el pasado podría haber sido un asesino sanguinario. Un detective azotado por los horrores que ha vivido se convierte en la única esperanza de aclarar los turbios orígenes de una familia que merece tener, por fin, un mínimo de felicidad en su vida…A lo largo de las páginas, los nudos del pasado se van desentrañando, cada pista da lugar a una nueva historia, obteniendo siempre un nuevo cabo del que tirar. Los rencores y secretos ocultos en la isla se van desvelando, lo que conduce paulatinamente  hacia un final que se ve cada vez más ominoso, que se remata de maravilla para dejarnos un gran sabor de boca y un pequeño agujero en el alma.
Tiene de todo, y bonito. Así da gusto leer.

El peor

DRACO DE FUEGO (Nick Kyme)
Tradicionalmente, el peor libro es la categoría más clara, con la que menos me cuesta decidir el ganador. Sin embargo, este año los contendientes han hecho unos méritos tremebundos por decepcionarme, opositando con ahínco a tal cuestionable honor. Al final ha sido la reciente Draco de fuego la que se ha llevado el gato al agua. Incluso partiendo de las pocas exigencias de la franquicia del cuadragésimo primer milenio, Nick Kyme ha conseguido impactarme en todos los sentidos. Empieza con un salto temporal de cuarenta años que no se molesta en explicar, no te recuerda quién es tal o cual personaje, tampoco se molesta en diferenciarlos, jalona las páginas con montones de dejes cansinos que entorpecen un ritmo ya lento de por sí y, finalmente, contiene la acción más pésimamente coreografiada de la franquicia. En conclusión, un horror. 



En fin, esto ha sido todo lo que concierne a los libros de este año. Cualquiera de los tres ganadores hará las delicias de un lector dedicado. Si mis comentarios os han puesto los dientes largos, no dudéis, no os decepcionarán. Por el resto, deseo a todos buenas lecturas y un buen 2017. 
En unos días, las películas :) 

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