Wanted (Se busca)

Que conste que estaba convencido que Wanted (Se busca) iba a ser un Western. Pues no. Creo que no podía ser algo más diferente, je, je.

La primera escena ya es de impresión. El personaje principal coge carrerilla en un ascensor (lo abolla), pasa zumbando el pasillo, rompe el cristal blindado y, cual Neo desbocado, salta al edificio de enfrente. En el aire vacía el cargador y se las arregla para lanzar un tiro con efecto que mata a un malo escondido. Una vez ha limpiado el área, recibe un disparo de francotirador desde más de cincuenta kilómetros. PERO QUE SE HA FUMADO EL DIRECTOR… Bueno, ya nos podemos hacer a la idea de que tipo de película es, ¿no? Básicamente una chorrada como un piano en la que la lógica o la coherencia no es algo que se vaya a respetar lo más mínimo.

Después de esta pedazo escena, saltamos a ver la vida de un pringadete de los gordos, al que un buen día se le aparece la Jolie y le explica que es miembro de una estirpe de asesinos que gobierna el mundo en la sombra. Empezando así un entrenamiento pasadísimo de vueltas mientras asciende en la organización.

Después de aprender a lanzar balas con efecto, aparecen unos malos malosos que quieren acabar con la hermandad, porque…bueno, porque quieren acabar con ella. Pero no pensemos que los asesinos tienen más lógica, porque tampoco es que tengamos alguna idea de porqué obedecen a un misterioso telar que escribe en lenguaje binario.

Si la premisa argumental es digna de una peli porno, el trabajo actoral no es precisamente mejor. Todo el elenco es consciente de estar haciendo una patochada y actúan en consecuencia. Sus personajes se reducen a ser su propio tópico encarnado. Morgan Freeman hace de, eso, de Morgan Freeman, presumiendo de solemnidad y de lenguaje recargadísimo. Angelina Jolie es, por su parte, Angelina Jolie. Una mujer fatal que enseña carne con generosidad, pega unos besazos la mar de lúbricos y arrea toñas como panes, que por algo hizo de Lara Croft en su momento. El protagonista es James McAvoy, del que tampoco hay que destacar mucho, ya que apenas vemos su cara. Eso sí, las balas que lanza o las hostias que da, sí que las vemos ralentizadas y en primerísimo plano. Los secundarios apenas merecen mención, aunque hace gracia ver a un Chris Pratt jovencito y regordete.

Por si no os habíais dado cuenta, la película es puro fuego de artificio. Las escenas de acción son pura desmesura, un descontrol de animaladas, golpes, choques, disparos y fantasmadas de bandera. Me gustaría saber la cantidad de estupefacientes que hay que tener en el cuerpo para concebir tal cantidad de bastardadas. Casi como en una película porno, dan ganas de que los personajes dejen de hablar y se pongan “en marcha”. Es que es de traca, hay derrapes, coches voladores, balas direccionables y desmontables, lanzan ratas-bomba, se tiran por precipicios insondables, detienen balas haciéndolas chocar con otras balas o cortándolas por la mitad en el aire, se curan de las heridas con bañeras regenerativas e incluso a uno le revientan el jeto de un golpe de teclado y las teclas despedidas forman una frase con sentido dentro de la escena. Todo fantasmadas a lo Matrix pero a las bravas, simplemente porque ellos lo valen. 

¿Qué menos que liarse a tiros encima del capó de un Viper en marcha?

Tal cantidad de flipadas gratuitas suelen echarme de la película, pero esta vez ha caído en gracia y me lo he pasado en grande. La acción es tan grotesca, tan ridícula, que se hace imposible no descojonarse con ella.

La película no deja de estar  en la onda de Bekmanmetov. Ninguna de sus películas tiene el más mínimo sentido y no destacan más que por tener coreografías de acción descontrolada. No podemos negar que el hombre tiene estilo, que luego no tenga idea de hilar una historia es otra cuestión. Por lo menos esta vez la ensalada de vísceras, tiros, bullets time y acrobacias le ha salido divertida, por pura suerte, pero ha conseguido sorprenderme y que me descojone a gusto durante dos horitas.

Nota: 3

Nota filmaffinity: 5.4

El despliegue técnico en la película es de primer nivel –no hay nada como tener presupuesto-, reconocido con dos nominaciones a los Oscar, a Mejor Sonido y Mejores Efectos Sonoros (ponéos el Super Sensurround más bestia que podáis y buscad apreciar lo logrado que está).